Sólo somos dueños de
trocitos de nada, retales de momentos esfumados, algunas construcciones de
cartón y poco más. Del material del que están hechas las ausencias inventadas,
que por imaginadas, parecen más ausentes. Y somos a la vez, propietarios de un
rotundo archivo de ausencias concretas.
Pero qué importa la
intangibilidad de nuestro patrimonio. Siempre nos queda la incertidumbre.
Somos las cientos de posibilidades desaprovechadas. Y en ese mar, gotas
ResponderEliminarpropietarios de un rotundo archivo de ausencias concretas.
ResponderEliminarme ha encantado.
un saludo.
pd: a mí no me queda ni la certeza de la incertidumbre.
muy bueno!! lo comparto y celebro que así sea...
ResponderEliminarun cariño,
Queda.
ResponderEliminar… y la capacidad de seguir creando ilusión allá donde vamos.
ResponderEliminarEntre certezas e incertidumbres siempre asecha la sospecha, la duda. La duda es la que nos hace crecer como personas, la que nos lleva a la reflexión.
ResponderEliminarAbrazos
Hoy, en la ducha pensaba yo entre las certezas y las incertidumbres, esas palabras que nos rodean...
ResponderEliminarMe ha hecho gracia encontrarte por aquí, creo que me quedaré por tus "cuenteras personales."
Besicos.
Un retrato claro de las personas de presente incierto y futuro dudoso. BRAVO.
ResponderEliminarMuestras que los valientes pueden vivir así.